¡Tenemos la Solución!
El tratamiento para mitigar la corrosión en cualquier tipo de rociadores consiste en el uso de un
detergente bioestático e inhibidor de corrosión por medio de inyección y en el monitoreo por medio
de cupones de corrosión.
Nuestro detergente limpiador deja una fórmula activa balanceada en la superficie interna de las
tuberías, realizando una máxima penetración y dispersión de los aceites y otros hidrocarburos que
actúan como fuentes de alimentos para formar bacterias.